El arquero islandés, un snowboarder frustrado y cineasta de moderado de éxito, contó que "estudió" al capitán de la Selección Argentina. Le atajó un penal clave.
por Oscar González
MOSCU, Rusia.- En 1999, la película “Cómo ser John Malkovich” (Bein’ John Malkovich) triunfó en todo el mundo con un argumento singular; John Cusack encontraba un pasadizo secreto que le permitía llegar a la mente del actor John Malkovich, instalarse durante unos minutos allí y vivir sus emociones.
Casi dos décadas después, a Hannes Halldorson quizá le sirvió su formación como cineasta, puede que recordase el film de Spike Jonze y que, realmente, encontrase el túnel que conducía de forma directa a la mente de Messi, instantes antes de que el genio de Rosario lanzase el penal, para adivinar su intención.
Unos cuantos minutos después, convertido en el héroe y con el premio de mejor jugador del partido en la mano, el guardameta islandés desvelaba su secreto: “Estudié a Messi. Intenté entrar en su cabeza, tenía un pensamiento de que podía ir por ahí”.
No dijo, sin embargo, el arquero si hubo algo más, si realmente existe el pasadizo ideado por Jonze.
Porque todo es posible con Hannes Halldorson, que copa este domingo las portadas de medio mundo, que fue un snowboarder frustrado, un cineasta de moderado éxito en su país y que, hasta la treintena, no logró vivir de lo que más le gusta; amargarle la vida a las estrellas del fútbol.
Nacido en Breidholt, a las afueras de Reikiavik, Hannes Halldorsson renunció con catorce años a su incipiente carrera en la nieve, tras chocar con su padre y dislocarse el hombro.
Probó en el fútbol, se hizo arquero por consejo de un amigo y, con 20 años, en 2004, tras ser rechazado por un equipo de la tercera división islandesa, el Numi, se abandonó.
Halldorsson, que desde el instituto se había interesado por la imagen, comenzó realizando videos promocionales para un grupo femenino amigo (“Nylon”) y se forjó su carrera como cineasta en Islandia.
Hasta que un día, frente al espejo, tomó una decisión: “Pesaba 105 kilos. Me paré delante del espejo, me hice una foto y me dije; no quiero parecerme a éste”, señalaría años después.
Retomó con fuerza los entrenamientos y relanzó su carrera de forma meteórica; Tercera, Segunda, Primera… Debutó con el Fram en la Liga Europa y conquistó el doblete islandés con el RK.
De forma paralela, creció su prestigio como realizador, sobre todo, tras dirigir una película Leynilögga, tan exitosa como surrealista. Un film de acción sobre dos policías homosexuales. “Las persecuciones automovilísticas en Reikiavik son tan absurdas que a la gente le encantó”, recordaba en 2014.
Durante años compaginó sus dos profesiones. Dirigió anuncios para Ikea, el video de la canción de Greta Salomé y Jonsi (Never forget), con la que Islandia concursó en Eurovisión (vigésimo puesto), y hasta el promocional de Icelandair con la selección islandesa; cuando se acercó a los que eran sus ídolos y que poco después serían sus compañeros.
Y fue progresando como arquero, hasta llegar a ser internacional en la fase de clasificación de la Eurocopa 2012, frente a Chipre. El nacimiento de su hijo, un año después, le llevó a tomar una decisión: tan sólo podría centrarse en un oficio y ése era el de guardameta.
Pese a que no ha dejado de dirigir, -e hizo el promocional de Coca Cola sobre su selección para este campeonato- Halldorsson es, sobre todo, un guardameta de éxito. Capaz de frustrar a Cristiano Ronaldo en la Eurocopa 2016 y de detener un penalti a Leo Messi el sábado. Dueño del secreto para entrar en la mente del astro argentino.
EFE.